Habitantes de la localidad de Jamey, en la provincia de San Cristóbal, lograron capturar a un individuo conocido como Rodolfo del Rosario, alias “Pilón”, quien presuntamente mantenía en su poder a la menor de 11 años, Birledy Peña Jiménez, proveniente de Villa Altagracia.
Los vecinos de Jamey, al descubrir al acusado, tomaron medidas enérgicas al respecto, sometiéndolo a interrogatorio y deteniéndolo.
Previo a su aprehensión, “Pilón” protagonizó una actuación llamativa, sugiriendo que estaba poseído por un demonio. Una vez capturado, incluso emitió amenazas al afirmar que pertenecía a la banda de Los Trinitarios 30-30.
La comunidad trasladó a “Pilón” a la estación de policía del municipio de Hato Damas y posteriormente fue llevado al cuartel de la 17ª en la provincia de San Cristóbal.
Aunque la menor no ha presentado una confesión en formato de video, uno de los testigos del caso asegura que la niña admitió haber sido retenida de manera forzada por el acusado. Sin embargo, en un video, la niña envió un mensaje a su familia afirmando haberse casado, lo cual ha añadido un giro inesperado a la investigación, generando incertidumbre y preocupación en la comunidad. Las autoridades locales están realizando una minuciosa investigación con el fin de verificar los detalles y esclarecer los hechos.
Mientras tanto, los habitantes de Jamey siguen de cerca la evolución de este caso, que ha reavivado el debate en torno a la seguridad de los niños y la eficacia de los sistemas de protección en la región.
La madre de la menor, Rosely Jiménez, ha ofrecido declaraciones en las que señala que aparentemente ella autorizó a su hija a visitar la residencia del individuo conocido como “Pilón”, debido a que la esposa de este solicitó su ayuda para tareas domésticas. Después de ese día, la niña no regresó a su hogar.